miércoles, 18 de junio de 2008

Mítica Beatriz

Me reflejo en tu mirada, la indiferencia me transporta al limbo del olvido.
Busco tu pensamiento en los mares del infierno. Quisiera estar a tu lado, sumergirme entre tus rizos juguetear con el destino.
Tormenta de silencio que vuelca la barca de ilusión, en la que navega un aventurero lleno de temor. Relámpagos de frialdad salpican mi mar, permíteme escuchar tu canto sirena de metal. Solo quiero estar en el aliento de tu soledad, deja de jugar, abrázame en los círculos de mi tempestad… cansado solo estoy de navegar.

1 comentario:

iskander dijo...

Hola Erika.

Leyéndote y viendo tus fotografías me doy cuenta de que, aunque no siempre sea evidente, formamos parte de una historia. Tal vez es una historia dispersa, pero a veces --sólo a veces-- pareciera que el tiempo no pasa y que todos estamos aquí, cerca, al alcance de la mano. No sé por qué hoy me desperté y pensé en Anabelle... la recordé cuando llegaba a nuestras clases de los lunes en la UDLA con su maleta de rueditas. Me acordé también de tí, de Abner, de Regina, de Adriana, de Isis, de Procella... A ratos parece que la realidad no es sino una fotografía del pasado y que todos estamos allí, sonrientes y llenos de vida.

Gracias.

Alejandra